jueves, noviembre 30, 2006

Lo último del Zorro

El siguiente relato contiene momentos cinéfilos, gemelas regias, una crisis fraternal, una inundación, algo de realismo mágico patito y claro, no puede faltar la poca originalidad de recordar fragmentos del sexenio de Fotz, el cual termina hoy a la medianoche.

Para empezar, no sé si dieron cuenta, pero este mes que termina en muchas ciudades de nuestro país tuvimos en cartelera 4 películas dirigidas por cineastas mexicanos: El Laberinto del Fauno (Guillermo del Toro), Babel (Alejandro González Iñárritu) e Hijos del Hombre (Alfonso Cuarón). Sin embargo, el documental En el Hoyo, del director Juan Carlos Rulfo sólo estuvo una semana en exhibición aquí en Monterrey, y me perdí su proyección.

Para mí fue un suceso notable, porque cada uno mediante su perseverancia y talento está ahí, están presentes en las pantallas, en los diálogos, en el póster y en las pláticas de café de los que amamos el cine. Además se consolidan como la nueva generación de directores que ante la No Industria de Cine Mexicano, construyen sus proyectos y se abren puertas en el extranjero.

Que lejano me parece aquel día cuando veía Sólo con tu pareja, la primera película que vi de Alfonso Cuarón, ignorando que era de él… hasta mucho después. Tenía yo como 12 años. Para mi fue una genialidad, porque el tema del SIDA era tratado con humor mexicano y nada que ver con la cinta lacrimógena de Philadelphia (1993), con un Tom Hanks dramático y agonizante. Cuarón introdujo el tema en mi mente, sin pretensiones ni moralismo: el SIDA.

Fue en esta película que Daniel Giménez Cacho brilló como el cínico amante que saltaba de cama en cama y se cepillaba a las defeñas que caían en su lecho promiscuo; memorable es la secuencia donde está con dos tipas simultáneamente y tiene que salir de su depa por el balcón para estar con ellas, o cuando decide suicidarse con un horno de microondas.. jajaja. Tampoco se puede soslayar la participación de Claudia Ramírez como el objeto del deseo de Tomás (Giménez Cacho). Claro que el final en la Torre Latinoamericana es épico y no lo escribo porque sé que lamentablemente hay muchas personas que no han visto la película.

Lo último de Cuarón no podía ser una película mediocre, por lo que Grace y yo fuimos el domingo pasado a verla, convencidos por la interesante premisa sobre la infertilidad mundial y el caos mundial (¿cuándo ha cesado?). Y en efecto, este defeño nacido en 1961 le ofrece a los cinéfilos una cinta honesta, digna de Hollywood pero sin la banalidad habitual.

La película me gustó tanto que el lunes después de que Grace y yo botaneamos unas ricas crepas en Cinépolis, ella me dijo que porqué no entraba al cine (ella se iba al Gym) total que tenía unos cupones para precio de miércoles. Sin embargo, le comparto a mis lectores que no me gusta ir al cine solo... díganme lo que quieran, pero en verdad es algo que no disfruto. Para mí el cine es una experiencia colectiva, que sería de las películas de horror sin las clásicas niñas de prepa que gritan como si les pagaran, o ir a ver una comedia con el cine lleno y contagiarse de la risa. En fin.

Aquí aparecen las gemelas regias que mencionaba al principio, las hermanas de Rosy, la mejor amiga de Grace aquí en Monterrey. Gracias a ellas no entré al cine solo y hasta las convencí de ver Hijos del Hombre. Así es, mi segunda vez. Bien divertidas ellas, una tenía clase al otro día y la otra examen de patologías (¿?) pero ahí estaban. Antes y después platicamos sobre El Señor de los Anillos y Matrix... las gemelas también son adictas al cine.

Entra el realismo mágico... de regreso Grace pasó por mí al cine y nos dirigimos a su casa, venía toda contenta del gym y platicamos de cosas triviales con música de fondo en el coche. Así, palabra más palabras menos, hasta que llegamos a su casa y notamos un fuerte ruido, tipo cascada, que se oía en su depa. Abrimos la puerta y ZAS!! estaba todo inundado, la sala, el comedor, el baño y así a medida que nuestros pies se empapaban al entrar más en su casa. De inmediato corrí a cerrar la llave de paso del agua, pero ya era tarde... había como 2 centímetros de agua en toda casa, y el baño, el cuarto de lavado y el patio se convirtieron en una alberca... Pues ya todo sacado de onda, empecé a ayudarla quitando las conexiones de la tele y la PC del piso, empezando a sacar el agua con escobas, porque no había escurridor (sic) y llamarle al plomero del edificio para que viniera a reparar al fuga (vino al otro día!!!).

Pero ahí no para la cosa, noooo. Claro que Grace le llamó a su hermano para que viniera ayudar, pero el tipillo todo despreocupado llegó media hora después porque estaba con la novia. Aquí entra la crisis fraternal... Grace se enojó con él por su irresponsabilidad y el otro hizo pancho porque la mamá le habló para que fuera a ayudar a su hermana. O sea, tu casa se inundó!!!

Vicente Fox

Puedo pensar en más de una persona que está feliz porque Chente ya se larga al rancho, donde no llegan los periódicos y aunque llegaran no los leería, pero no creo que su ñora Sahagún mantenga un perfil bajo con su (ro)Vamos México. Pienso en otra mayoría de ciudadanos que tienen sus esperanzas puestas en Calderón, su carrera política, la confianza de su triunfo electoral, su formación académica y el 35% de los mexicanos que votaron por él. A diferencia de Fox, Calderón no trae el bono democrático de hace seis años y en cambio hereda una crisis política que se niega en convertirse en cicatriz. El michoacano la tiene complicada y en parte por culpa del PresiChente.

Esto porque al final del sexenio Fox se obsesionó con ser el Presidente que trajo la Democracia a nuestro país e introdujo la libertad de prensa (sic). Estos últimos spots con la frase "Con esto de la democracia..." me resultan irritantes y más porque en 2006 el Gobierno Federal se cansó de publicitar su migajas de logros. Comunicar se volvió Gobernar en Los Pinos. Además, como lo mencionó el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Fox constantemente intervino en el proceso electoral pasado por su otra obsesión, la de evitar al triunfo del Peje. Se nota que olvidó cuando él portaba boletas electorales simulando, su reproche a Salinas en el 1988.

Él se va y nos quedan los perredistas nefastos atrincherados todavía en San Lázaro, el Peje legitimo con sus aires de grandeza pero la falta de valor para aceptar la derrota, y una ceremonioa de sucesión todavía en suspenso. Pienso... Fox y su pasividad le hicieron tanto daño a México como los excesos de poder de los PRIsidentes de la otrora dictadura perfecta.


domingo, noviembre 19, 2006

De ocho columnas

Hoy en el periódico Milenio Diario de Monterrey aparece publicada una nota con mi firma, siendo esta la primera ocasión que veo mi nombre impreso en un periódico de tierras del Piporro. La información es relativa al perfil del dramaturgo mexicano, Jaime Chabaud, reciente ganador del Premio de Dramaturgia “Víctor Hugo Rascón Banda”.

La primera vez que publiqué algo fue en el periódico jarocho Imagen de Veracruz, donde tenía una columna de cine, aunque nunca tuve la pretensión de ser EL crítico que Veracruz esperaba, sino escribir sobre una de mis grandes pasiones, el séptimo arte!! Ahora tuve la posibilidad de redactar esto y espero que no sea lo último. En fin, a ver que sucede en lo futuro.


lunes, noviembre 13, 2006

Dios es redondo

Le ha llegado el momento ha este blog de compartir sobre el Fútbol Mexicano con sus 4, 5 lectores… y más oportuno ahora que el torneo regular ha llegado a su fin y 6 son los equipos ya clasificados que buscan ser Campeón: Cruz Azul, Pumas, Monterrey, Pachuca, Atlas y América. Todavía hay 2 lugares disponibles para la liguilla y 4 equipos se los disputan: Toluca vs Jaguares y Guadalajara vs Veracruz. Hagan sus apuestas!!!

Por otra parte, es increíble que el Toluca siendo el líder general la mayoría del Torneo, tenga que jugar la reclasificación, lo cual me recuerda lo insólito y mediocre que puede ser nuestra Liga Mexicana. Pero me alegra que el Cruz Azul finalmente haya sido el líder general del torneo y aunque Sabah no pudo ser el Campeón Goleador (Bravo Marioni!!) él y los cementeros tienen la difícil tarea de coronarse y dejar la mala fama de quedar a mitad de camino. La última vez que fueron campeones, Carlos Hermosillo cobraba un penal ante los panzas verdes del León… así como de película, herido y con la esperanza de vengarse deportivamente del portero Miguel Angel Comizzo. Corría el año de 1997 y el cielo fue más Azul que nunca.

Y es que a pesar de ser del Puerto Jarocho, el Veracruz sólo fue mi equipo de niño y el Cruz Azul lo ha sido desde que perdió la final en el partido de vuelta contra el Necaxa con aquellos goles de Aguinaga (sinónimo del Necaxa en mi opinión) e Ivo Basay. Mis grandes recuerdos de los Tiburones son de cuando el argentino Jorge Comas brillaba en la cancha y mi hermano y yo nos dejamos una colita en el cabello, igual como él la traía. Comas fue el Campeón Goleador del Torneo 1989-1990 y el Veracruz no ha tenido otro delantero como él.

Inserte la canción de Los años maravillosos: Recuerdo la primera vez que fui a un partido de fútbol allá en mi natal Veracruz, tenía unos 8 años, mi papá nos llevó a ver el juego de los Tiburones Rojos contra las Águilas del América, el estadio Pirata estaba totalmente repleto y yo estaba maravillado con lo verde del campo de juego. En aquella ocasión descubrí algo curioso, la afición jarocha lanzaba tremendos gritos cuando el sonido local anunciaba la alineación del equipo visitante, entonces yo le pregunté a mi papá ¿Qué dicen?.. y mi papá respondió con una sonrisa… “ehhh…Brutos… dicen Brutos”, claro que después de 5 veces me di cuenta que gritaban PUTOS y le dije inocentemente a mi padre, “No papá, les dicen Putos”.

Pero mi pasión por el Fútbol se hizo mayor. Corría el año de 1994, mi hermana había traído a este mundo a mi primer sobrino, Ramiro (sí, igual que yo), y nuestra Selección estaba en el Grupo E con los equipos de Irlanda, Italia y Noruega. Era el primer Mundial que mis ojos presenciaron y recuerdo el partido contra Italia, nuestra maestra en la primaria le dio chance a algún compañero de llevar una tele portátil y ahí estábamos, sufriendo desde el aula, entre planas y libros de texto, mientras México conseguía un empate con gol de Marcelino Bernal. Memorable. Desde entonces soy uno más de los que sueñan, sufren, vitorean y maldicen los partidos de la Selección Mexicana.

Ahora tengo una apuesta con el Ing. Abner Mendoza González, mi amigo, él es un apasionado de la Chivas al igual que Claudia, y apostamos una cena porque su equipo se enfrentará a mi equipo de la infancia, los Tiburones, en la reclasificación (mejor conocida como repesca o repechaje). ¿Por qué aposté? Ahh porque después de una larga ausencia (años) mi hermano y yo regresamos (ya sin la colitas de Comas) al Luis Pirata Fuentes a ver jugar al Veracruz en el Torneo pasado, cuando se salvaron del descenso, aprovechando que estaba en el Puerto con motivo de mi proceso de titulación.

Mayor fue la celebración en Septiembre, porque se juntaron mi cumpleaños, mi ceremonia de titulación y el triunfo del Veracruz vs Tigres en este torneo. En esa ocasión también fui con mi hermano, pero ahora llevamos a nuestros sobrinos: Ramiro y Leonardo, los mismos nombres que nosotros, la misma sangre.

Pensamiento marginal: para aquellos que piensan que el fútbol es para la masa no pensante o que es naco… ahí está el Mundial y su poder de convocatoria, la filosofía de Valdano y Menotti, el marketing y la publicidad de Puma, Adidas y Nike, e incluso un nuevo libro del intelectual Juan Villoro: Dios es redondo.